24 de febrero de 2011

La laptop de mi viejo!




En una de las visitas que realizo a casa de mis padres vi a mi madre ordenando la casa y renegando, con cierta sonrisa sarcástica, por el desorden de mis hermanas. Una de ellas tiene un pequeño cementerio de laptops en su dormitorio; tres pequeños ordenadores que sucumbieron, en poco tiempo, y pasaron a mejor vida a manos de mi descuidada hermana.  

Conversando con mis viejos sobre lo ocurrido, mi papá comentó muy suelto que en su época universitaria él tenía una “laptop” de esa época que aún funcionaba. A punto de burlarme de su osadía, pues en aquella época no existían siquiera las computadoras de escritorio, le pregunté dónde estaba y no tardó más de media hora en encontrarla. Era una máquina de escribir portátil marca Brother, modelo 220, pequeña, que venía con una tapa que se anclaba y que simulaba un maletín. “Esta era la laptop que llevaba a la universidad”  me comentó, lo cual creí, y además, me dijo que solo algunos privilegiados tenían una máquina de escribir portátil como para llevar a la universidad.





Empecé a recordar todas las cosas que, considerándome yo un joven, hacen que parezca un anciano al lado de mi hermana de 14 años. 

GAME BOY

No tuve la oportunidad de tener uno, pues en la época que yo era pequeño recién salíamos de aquellas prohibiciones a las importaciones de los gobiernos ochenteros, lo que nos dejaba en una isla alejados de la tecnología, pues si queríamos tener un GAME BOY teníamos que tener la suerte de tener algún familiar que viniera de Estados Unidos y que pudiera traernos uno.



Era monocromático, tenía solo dos botones de acción y uno en forma de cruz para dirigir al personaje. Solo dos de mis amigos lo tenían, con suerte podías jugar solo 5 minutos, pues éramos varios lo que pedíamos prestado aquel juguete, y las baterías duraban menos de media hora.

Hoy en día hay una oferta imbatible de Nintendos DS en 3D y PSP, con acceso a Internet y Wi FI. No obstante, cuando aparecen en el mercado estos aparatos, el precio es elevado, te demoras varios meses en juntar el dinero y cuando lo compras, ya salió una versión mejorada que hace obsoleto el que acabas de adquirir.

BETAMAX

En un mundo inundado por el Blue Ray y la televisión HD, creo que nadie se acuerda del BETAMAX, esos reproductores de películas, que utilizaban unos carretes de plásticos con una cinta magnética que te permitía disfrutar de las mejores películas en casa.


Tampoco tuve un BETA en mi casa, nosotros saltamos al VHS; recuerdo que le daba un uso ilegal que consistía en poner cinta negra para instalaciones eléctricas en la pantalla, para q de noche parezca que se encontraba apagado; lo programaba para que se prenda los viernes a las 10pm en el Canal 13 y grababa todos los capítulos de la Serie Rosa.

El VHS estaba en el dormitorio de mis padres, por lo que tenía que ocultar la pantalla para que mi madre no descubra que estaba grabando series para adultos. Recuerdo que una mañana comentaba medio asustada que el VHS parecía haber cobrado vida, pues estando “apagado”, sonaba como si estuviera funcionando. Yo con cierto nerviosismo le decía que así eran esos aparatos nuevos, sonaban cuando estaban apagados porque los cabezales tenían que estar en movimiento para no malograrse…………jajajajajaja……….. pobre mi madre, se tragaba el cuento………o hacía creerme ello.

TANGO 300

Fue mi primer celular, no identificaba llamadas, ni recibía mensajes de texto, únicamente servía para llamar. No lo usé mucho, pero duró bastante, pues parecía un ladrillo, recuerdo que una vez quisieron robarme la billetera y le tiré el celular en la cabeza al ladrón, me sirvió para defenderme e impedir el robo.


Hoy, luego de 12 años, tenemos celulares con acceso a internet, gps y muy pronto servirán para efectuar pagos, siendo medio indiscutible para acreditar nuestra identidad.

ESTO ES PRODUCTO DE LA NUEVA ECONOMÍA

No hay que ser economista para entender un poco la lógica de la teoría de los ciclos económicos que nos explica un poco el por qué de todo este boom tecnológico que nos hace consumir y consumir productos que no necesariamente son indispensables en nuestras vidas.

Las cosas se fabrican con una fecha de vencimiento ya establecida, el televisor de pantalla curva que compraste hace 5 años ya no servirá dentro de 15 años, cuando se produzca el “apagón” tan famoso que hará que lo único que impere en el espectro radioeléctrico sea la televisión digital.

Según nos explica esta teoría, en una una economía capitalista de mercado, la creación acelerada de productos y su consecuente producción en masa es cíclico, pues se inventan cosas revolucionarias (Ipods, Blackberrys, GPS, Televisores LCD, etc.) y su productividad y demanda aumentan.

Esta expansión tiene un límite, cuando ya todos lo tienen dejan de consumirlo y se vuelve algo habitual, por lo que la productividad deja de crecer y los beneficios que buscaban los productores bajan, entonces la economía empieza a ponerse lenta y llega la recesión.

Como todos tenemos un presupuesto establecido para tecnología, los productores apuestan por el dinamismo, fabrican televisores que durarán con suerte 10 años. Los consumidores parece que estamos conformes con ello, pues pensamos ¿de qué nos sirve un televisor LCD que dure 10 años si en unos 3 años todo será en 3D?.

A favor o en contra de esta explicación económica del consumismo actual, lo cierto es que la rotación de aparatos electrónicos en nuestra vida es alta, seguimos consumiendo tecnología y hasta somos esclavos de ella. Probablemente estés pensando ya en tirar el viejo televisor de 21 pulgadas para reemplazarlo por un LED 3D que hará vivir la televisión al máximo……………..


3 comentarios:

  1. ahhaahahaha

    esos artefactoss a todos nos sirvieron una vez

    ...........bonito blog

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  2. Ese Gameboy...como lo añoraba!
    Me gusta, la cagada como has definido el consumismo.
    Lo peor es que ya no puedo jugar con esos nintendos modernos, me aburre..pero dame un gameboy...

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  3. Jajajaja tantas cosas obsoletas que en algún momento quisimos y tuvimos y otras que quedaron solo como deseo sin poder adquirirlos y ahora no tienen ningún tipo de valor, solo queda para el recuerdo. Muy buen blog "Chabelin".

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